Como no podía ser de otra manera. y puesto que soy una vendida al sistema, lo reconozco, cada vez que estrenan una película basada en alguna saga juvenil, corro a adquirirla lo antes posible, no me vaya a haber perdido el novelón del siglo.
No voy a decir mis fuentes pero encontré un filón para mi tablet de modo que me estoy poniendo al día en sagas atrasadas y otras más novedosas...
Ayer terminé el tercero de los libros de Divergente, de Veronica Roth, sorprendida, aunque toda la trama me resultó más o menos previsible, por como remata el temita, pero en general he de reconecer que me ha tenido en vilo durante gran parte de la trama.
Como libros para adolescentes del siglo XXI, tienen su dosis tremenda de acción, violencia, amor, amistad y política. En un principio sí vi ciertos paralelismos con la otra saga en cartelera, (ya lo de las portadas de los libros me pareció demasiado similar, quizá para captar a los mismo lectores, con más de lo mismo sin conocer nada sobre el significado de cada símbolo) Los juegos del hambre, de Suzanne Collins y su sinsajo, en cuanto a la juventud de los protagonistas, la más que prota una chica, sus decisiones de vida o muerte, el destino de las comunidades, ciudades o pueblos, pero cada una tiene lo suyo, y no dejan de ser interesantes por la visión común de políticos corrompidos por el poder, a la vista está lo que están conociendo de primera mano estos jóvenes escritores en la vida real.
Vamos, que ya hasta he aprendido el término ficción distópica en contraposición a esos mundos con sociedades utópicas y bucólicas recreados en otros libros mientras que en estos se ve desde un momento que la cosa no puede terminar bien...
En cuanto a los protagonistas elegidos en las películas, al igual que me
sucedió con Jennifer Lawrence en su día, que no me gustó nada, lo mismo
opino de Shailene Woodley, no me encaja ni con cola en la imagen que me
hago de Tris, pero es lo que hay y uno acaba acostumbrándose, después
de media hora de película se te olvida y te vas adaptando a verlas, los
chicos sí se amoldan más al tipo imaginado, pero claro, todo va en
cuestión de gustos.
Eso sí, ojo a la nueva moda de tatuajes, a ver con qué facción nos sorprenden los adolescentes en casa:
domingo, 18 de mayo de 2014
From Chile With Love... Parque Bicentenario Infancia
Ayer pasamos la mañana en la ladera Poniente del cerro de San Cristóbal, accedimos al parque por el mismo cerro, tomando el camino hacia los "camarines deportivos" y desde allí la senda cerrada para vehículos, tal como nos indicaron en la entrada del parque Metropolitano.
Tras un paseo desde allí, comenzamos a ver el barrio Recoleta y fuimos pasando un par de zonas de columpios y aparatos deportivos para hacer más ameno el camino, al final, tras rogar a la peque, pudimos llegar a la entrada, o salida, según como quieras acabar el día.
La idea original era ir andando por la Avenida del Perú hasta el 1001, que es donde está la entrada del parque, en esos casos juegan primero y paseas por el parque y puedes elegir subir en el teleférico gratuito a la parte más alta, saliendo al cerro y hacia Bellavista, hicimos la variante al revés porque así, tras el primer paseo largo (fuimos andando desde casa, atravesando el parque Bustamante, el puente sobre el Mapocho, el barrio de Bellavista...), bajaron toda la ladera tirándose en los toboganes, lo que les gustó mucho, incluso el padre se tiró por alguno, la pequeña abrazada a su hermana mayor.
Una vez abajo pudimos ver las "casitas en el árbol", los juegos de ratón, que recorren todo el perímetro y en donde tuvieron que ayudar de nuevo a la chiquitina los dos mayores, después el jardín de bolas de agua y finalmente los columpios de "guaguas".
La verdad es que está curioso y bonito, cuando en unos años los árboles den buena sombra será un sitio más que agradable, tuvimos la suerte de que el día fuera algo neblinoso porque si no al sol nos habríamos agobiado bastante, aunque eso no quitó para que los tres enanos se empaparan en las esferas y disfrutaran de lo lindo:
Las dos últimas no las saqué yo, se me fue la pinza, son de todoeduca.cl y del diario latercera.com...
Tras un paseo desde allí, comenzamos a ver el barrio Recoleta y fuimos pasando un par de zonas de columpios y aparatos deportivos para hacer más ameno el camino, al final, tras rogar a la peque, pudimos llegar a la entrada, o salida, según como quieras acabar el día.
La idea original era ir andando por la Avenida del Perú hasta el 1001, que es donde está la entrada del parque, en esos casos juegan primero y paseas por el parque y puedes elegir subir en el teleférico gratuito a la parte más alta, saliendo al cerro y hacia Bellavista, hicimos la variante al revés porque así, tras el primer paseo largo (fuimos andando desde casa, atravesando el parque Bustamante, el puente sobre el Mapocho, el barrio de Bellavista...), bajaron toda la ladera tirándose en los toboganes, lo que les gustó mucho, incluso el padre se tiró por alguno, la pequeña abrazada a su hermana mayor.
Una vez abajo pudimos ver las "casitas en el árbol", los juegos de ratón, que recorren todo el perímetro y en donde tuvieron que ayudar de nuevo a la chiquitina los dos mayores, después el jardín de bolas de agua y finalmente los columpios de "guaguas".
La verdad es que está curioso y bonito, cuando en unos años los árboles den buena sombra será un sitio más que agradable, tuvimos la suerte de que el día fuera algo neblinoso porque si no al sol nos habríamos agobiado bastante, aunque eso no quitó para que los tres enanos se empaparan en las esferas y disfrutaran de lo lindo:
Las dos últimas no las saqué yo, se me fue la pinza, son de todoeduca.cl y del diario latercera.com...
martes, 6 de mayo de 2014
From Chile With Love... Malls y esas cosas
Estamos muy acostumbrados a acercarnos al Tresaguas, nuestro segundo hogar, como quien dice, los fines de semana: cine, comida o tapeo, alguna compra, así que aquí nos pasa igual, en cualquier momento de un sábado nos acordamos de algo que nos falta o se nos encapricha película, allá que vamos.
Por ahora sólo hemos visitado el favorito del peque, Costanera Center, donde está el Hard Rock de Santiago; el de Parque Arauco, que no tiene gran cosa como edificio pero sí el entorno del parque y las hamburguesas de wagyu en el Mr. Jack (de morirse de gusto); y el de Alto Las Condes, que exteriormente es feo de vicio pero dentro tiene una estupenda zona wifi en la terraza y un parque de juegos para enanos al lado de la zona de máquinas recreativas, además de unas graciosas reproducciones de Lego en la tienda del mismo nombre. Ah, y la Boutique Nespresso, así que me toca volver a sacarme la tarjeta para que me manden mis cápsulas a casa...
Volviendo del Costanera, cuando damos paseo grande, hacemos escala en el Portal Lyon, galería alternativa, todo lleno de tiendas de tatuajes, piecings, comics, skate y camisetas cañeras (poleras aquí)
En el centro hay zonas comerciales en galerías por todas partes y en barrio Italia algo parecido pero a pequeña escala y con más estilo, vamos, que los fanáticos de las compras pueden dejarse los pesos donde quieran.
Tema aparte sería el mercadillo de BíoBío, los mercados de pulgas o las ventas de garaje que salen casi espontáneamente cada fin de semana en cualquier barrio/comuna y donde puedes encontrar todo tipo de reliquias del pasado, no siempre a buen precio.
Por ahora sólo hemos visitado el favorito del peque, Costanera Center, donde está el Hard Rock de Santiago; el de Parque Arauco, que no tiene gran cosa como edificio pero sí el entorno del parque y las hamburguesas de wagyu en el Mr. Jack (de morirse de gusto); y el de Alto Las Condes, que exteriormente es feo de vicio pero dentro tiene una estupenda zona wifi en la terraza y un parque de juegos para enanos al lado de la zona de máquinas recreativas, además de unas graciosas reproducciones de Lego en la tienda del mismo nombre. Ah, y la Boutique Nespresso, así que me toca volver a sacarme la tarjeta para que me manden mis cápsulas a casa...
Volviendo del Costanera, cuando damos paseo grande, hacemos escala en el Portal Lyon, galería alternativa, todo lleno de tiendas de tatuajes, piecings, comics, skate y camisetas cañeras (poleras aquí)
En el centro hay zonas comerciales en galerías por todas partes y en barrio Italia algo parecido pero a pequeña escala y con más estilo, vamos, que los fanáticos de las compras pueden dejarse los pesos donde quieran.
Tema aparte sería el mercadillo de BíoBío, los mercados de pulgas o las ventas de garaje que salen casi espontáneamente cada fin de semana en cualquier barrio/comuna y donde puedes encontrar todo tipo de reliquias del pasado, no siempre a buen precio.
From Chile With Love... Cerro Santa Lucía
Uno de esos fines de semana de idea feliz planifiqué visitar los barrios Lastarria y Bellas Artes, no salió exactamente como pensaba pero acabamos dando un buen paseo por el cerro de Santa Lucía, que nos encantó, unas estupendas vistas de Santiago y un disfrute de paseo por lo que queda de sus fortificaciones, como una imagen vale más que mil palabras y la wikipedia o cualquier guía os puede contar más sobre la historia del cerro:
domingo, 4 de mayo de 2014
Varios,arquitectura curiosa en Santiago
Algunos de los contrastes más curiosos de la ciudad, captados al paso, la mezcla de unifamiliares y rascacielos, casas tipo almacén o tipo palacio, es una mezcolanza muy curiosa, para muestra:
Vista del Costanera Center con el río Mapocho y otros rascacielos, van a acondicionar mejor la zona para disfrute de los santiaguinos y turistas, lo cual nos beneficiará a nosotros...
Esta casa hace esquina camino del cole, en Miguel Claro, me fascina desde la primera foto que nos envió el padre desde aquí, ha estado puesto el cartel de arriendo pero imagino que sólo las empresas pueden permitirse su arriendo/alquiler
Esta gracia está bajando Manuel Montt, me llamó mucho la atención por las escaleras, tan geométrico y despejado, no aptas si tienes vértigo...
No conseguí una buena visión pero es fascinante y volveré, queda muy anacrónico, otro castillo integrado entre torres de pisos
Sólo por la decoración de la puerta me quedé unos minutos disfrutando, original y colorista hotelillo.
Encontrarse un jardín zen en plena calle Suecia fue todo un descubrimiento, de igual forma, el poder asomarse a los patios de algunas casas bien cuidadas nos deja con la boca abierta.
Muestra del Sanhattan, desde el este hacia el oeste
Otras casas están tan destartaladas que es una pena, con algo de pintura y cariño podrían verse como reliquias de mucho valor.
Este es el palacete de la calle José Manuel Infante, muy cerquita de casa, me trae loca, es como la casa encantada del barrio, je je je.
Vista del Costanera Center con el río Mapocho y otros rascacielos, van a acondicionar mejor la zona para disfrute de los santiaguinos y turistas, lo cual nos beneficiará a nosotros...
Esta casa hace esquina camino del cole, en Miguel Claro, me fascina desde la primera foto que nos envió el padre desde aquí, ha estado puesto el cartel de arriendo pero imagino que sólo las empresas pueden permitirse su arriendo/alquiler
Esta gracia está bajando Manuel Montt, me llamó mucho la atención por las escaleras, tan geométrico y despejado, no aptas si tienes vértigo...
No conseguí una buena visión pero es fascinante y volveré, queda muy anacrónico, otro castillo integrado entre torres de pisos
Sólo por la decoración de la puerta me quedé unos minutos disfrutando, original y colorista hotelillo.
Encontrarse un jardín zen en plena calle Suecia fue todo un descubrimiento, de igual forma, el poder asomarse a los patios de algunas casas bien cuidadas nos deja con la boca abierta.
Muestra del Sanhattan, desde el este hacia el oeste
Otras casas están tan destartaladas que es una pena, con algo de pintura y cariño podrían verse como reliquias de mucho valor.
Este es el palacete de la calle José Manuel Infante, muy cerquita de casa, me trae loca, es como la casa encantada del barrio, je je je.
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